Un dron flotante logró filmar el corazón de un huracán frente a la costa estadounidense.
La costa este de Estados Unidos fue azotada por el huracán «Sam» la semana pasada. Este último, clasificado en la categoría 4 (de 5), fue objeto de un estudio bastante particular. NOAA, la agencia estadounidense de observación del océano, de hecho ha colocado un dron flotante llamado » Para explorar « para tomar fotografías lo más cerca posible del fenómeno.
En última instancia, los resultados son incluso mejores de lo esperado, ya que el dron terminó en el ojo de la tormenta. Bajo un cielo negro, la pequeña boya naranja filmó olas de 15 metros barridas por vientos de casi 200 kilómetros por hora. Saildrone, la empresa detrás del diseño de este pequeño dron asegura que está pensado para este tipo de eventos y que no parece, a primera vista, haber sufrido vientos y olas.
Un tesoro de información
Los datos recopilados por el dron, que actualmente está siendo analizado por NOAA, son muy valiosos. Esta es la primera vez en la historia que un dron se encuentra en el corazón de un huracán. Por lo tanto, la información recopilada podría permitir a los científicos rastrear el hilo y comprender mejor cómo se forma un fenómeno de este tipo en el corazón de nuestros océanos. La idea también es poder juzgar mejor la trayectoria y el nivel de potencia de un huracán para tener una mejor idea de las consecuencias de su paso.
Con el calentamiento global, se multiplicarán los fenómenos naturales cataclísmicos como los huracanes. Sin poder prevenirlos, los científicos hoy buscan convivir con él de la mejor manera posible. Por tanto, su estudio es fundamental para comprender mejor cómo se forman, pero también en qué medida pueden evolucionar, intensificarse o cambiar de rumbo. Esta es una información crucial, especialmente en el caso de un huracán o tormentas que pueden requerir evacuaciones de emergencia en casos extremos.