Microsoft anunció el año pasado que había llegado a un acuerdo para comprar Activision Blizzard, y Sony ha sido el mayor oponente desde entonces. Hasta la fecha, Sony Interactive Entertainment ha presentado muchos argumentos sobre por qué la transacción no sería buena para la industria de los videojuegos, pero no ha podido respaldar esos argumentos.
La audiencia probatoria de la demanda de la FTC que busca bloquear la compra de Microsoft y Activision Blizzard comenzó esta semana, por lo que ya hemos escuchado declaraciones de varios ejecutivos de Microsoft. Estos ejecutivos incluyen a Matt Booty, vicepresidente corporativo de Microsoft Studios, y Pete Hines, vicepresidente senior de marketing y comunicaciones globales de Bethesda.
Uno de los argumentos que ha utilizado Sony para impedir la realización del acuerdo entre Microsoft y Activision Blizzard es que podrían degradar la calidad de Call of Duty en sus versiones de PlayStation, esto para que las versiones de Xbox sean igual de superiores. . Sin embargo, durante el juicio se reveló que Sony nunca ha tenido ninguna queja con los juegos de Bethesda.
El primero en declarar fue Matt Booty, quien cuando se le preguntó si Sony se quejaba de que Xbox eliminaba los juegos de PlayStation o degradaba su calidad, respondió con un rotundo «No». A continuación, fue el turno de declarar de Pete Hines, quien dijo que Sony no solo nunca se quejó, sino que también tuvieron una respuesta muy positiva a los juegos de Bethesda en PlayStation que lanzaron después de ser adquiridos por Xbox.
Cabe señalar que, cuando Microsoft compró Zenimax y con él Bethesda, ya había acuerdos de exclusividad para Deathloop y Ghostwire Tokyo en PlayStation 5, que son los juegos a los que se refieren Matt Booty y Pete Hines.
Otro juego que ya tenía trato cuando compraron Zenimax fue el juego de Indiana Jones que está desarrollando MachineGames, ya que originalmente estaba destinado a ser un videojuego multiplataforma pero ahora es exclusivo para Xbox Series X|S y PC.
